martes, 19 de julio de 2011

La pobreza proporcional a la población

Objetivamente podemos suponer que la población está limitada por el tamaño del planeta y también podemos inferir que a medida que nos aproximamos al máximo empobreceremos progresivamente.

En otro artículo (1) les comentaba que el aumento de la población mundial es la causa principal (según creo, opino, me parece) de que nuestra vida sea mucho más compleja de lo que idealmente podemos suponer (imaginar).

En ese artículo les decía que alguien puede vivir dentro de una parcela de terreno durante décadas, aislado del resto de la humanidad, sin que su individualismo (aislamiento, narcisismo, soledad) sea objeto de crítica, pero con casi 7.000 millones de habitantes nuestra especie no puede desaprovechar tan irresponsablemente los recursos materiales de que disponemos dentro del planeta.

En muchos lugares del mundo los humanos vivimos sobre embarcaciones, sobre nieve, sobre rocas o en terrenos planos pero dentro de edificios de gran altura que pueden albergar a miles de personas aunque están construidos sobre superficies en las cuales, con criterio individualista, sólo podrían vivir diez o doce personas.

El vocablo «proxémica» fue creado hace relativamente poco tiempo (1963) para designar los diferentes estándares de espacio interpersonal utilizados por las diferentes culturas.

En otras palabras, un cónyuge, un amigo, un vecino, un proveedor o alguien que da una conferencia, son ubicados preferentemente a diferente distancia (tocándonos, tocables si estiramos el brazo, etc.).

Cuando las circunstancias transgreden estos estándares propios de cada cultura (hacinamiento, amontonamiento, aglomeración), reaccionamos con agresividad tratando de restablecer la distancia propia de nuestros criterios proxémicos.

En suma: el planeta tiene un tamaño limitado, por lo tanto nuestra población está acotada, no podemos crecer ilimitadamente. Mientras nos acercamos al límite el empobrecimiento es un fenómeno inevitable y progresivo, pues más personas tenemos que repartirnos los mismos bienes (superficie, proteínas, minerales, agua, abrigo).

(1) Capitalismo, población e individualismo

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10 comentarios:

Paty dijo...

La idea que yo tengo es que al planeta le queda un montonaso de espacio.

Paty dijo...

Ah! Yo de nuevo. Los que suben a ese tren pagan boleto y van peor que animales. Si serán sacrificados los chinos!

Norton dijo...

Cuando nos quede poco espacio en el planeta, seguro que ya se inventará la manera de producir alimentos o nutrientes de otra forma.

Selva dijo...

Los proveedores se me ponen a distancia cónyuge cuando no está mi marido. Cobardes!

Lucas dijo...

Con la super-población no vamos a empobrecer, en esto soy completamente optimista, sobre todo porque es un problema que no me va a tocar vivir.

Sebastián dijo...

Lo que es por ahora, podemos ser todo lo solitarios e individualistas que se nos venga en gana. Los únicos que tienen problema son los japoneses, una parte de los hindúes, una parte de los chinos, y puede que en alguna ciudad de europa. Además los tipos que están muy apretados emigran.
Preocupémonos por temas más acuciantes, doc.

Oriente dijo...

Los rascacielos no están construídos con criterio individualista, pero en cada apartamento viven individuos aislados de sus vecino. Salvo cuando se los usa para oficinas.

Yoel dijo...

Qué papel informativo y educador tiene el cine! Casi todo lo que sé es por las películas.

Nidia dijo...

La proxémica de los latinos es más apretada que la de los eslavos.

Lola dijo...

Mi criterio proxémico depende de la química.