miércoles, 21 de enero de 2009

La espiritualidad para ricos

La espiritualidad puede ser un recurso muy válido, legítimo y eficiente para facilitarnos la vida, aunque tiene sus costos. Desarrollar la espiritualidad cuesta dinero.

Existe la posibilidad de que esta práctica (la espiritualidad) esté al servicio de ignorar deliberadamente aspectos de la realidad que nos resultan muy angustiantes.

En la vida espiritual todo es posible: los enfermos se curan por un acto de fe, los muertos resucitan en un más allá, «no hay mal que por bien no venga», alguien «tuvo una desgracia con suerte», «Dios proveerá».

Este mundo mágico, con seres inmensamente poderosos, sabios y benefactores (dioses, santos, ángeles, vírgenes), con desgracias transitorias y reversibles, está en las antípodas de lo que necesitamos hacer para conseguir el alimento con que mantenernos vivos, es ineficiente para pagar el alquiler de un lugar donde pasar la noche, no logra proveernos de los gastos de salud que cada tanto tenemos que hacer para disminuir nuestro dolor o directamente para seguir vivos un tiempo más.

Si alguien piensa que puede ignorar la realidad gratuitamente, se está comportando tan irresponsablemente como un niño. Los adultos tenemos obligaciones para con nosotros mismos, para con nuestros hijos y para con la sociedad.

Toda la energía destinada a no ver las dificultades materiales poniendo mucho énfasis en las deliciosas fantasías de la espiritualidad, es un derroche tan imperdonable como quien tira alimentos sabiendo que hay semejantes hambrientos o el que roba a un desvalido o el que no asiste a un accidentado.

La espiritualidad es un pasatiempo que sólo tienen derecho a practicarlo quienes ya resolvieron las cuestiones materiales básicas (comida, vestimenta, salud, alojamiento).

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26 comentarios:

Anónimo dijo...

Si te gusta leer te recomiendo un libro acabo de terminar de leer un libro titulado LA PIEDRA HABBAASSI, que narra una nueva forma de entender la espiritualidad, en donde se recupera el conocimiento de culturas milenarias de distintos lugares del mundo.
Todo ello tratado dentro de una novela en donde además se tratan temas sobre civilizaciones perdidas, y ritos de iniciación, y desarrollo de capacidades dormidas.
Espero que te guste.

Anónimo dijo...

Todas las civilizaciones han tenido su forma de reconocer a su espíritu.

El artículo deja entrever una confusión entre religión y espíritu. Pero lo más grave es que pretende discriminar diciendo que la espiritualidad es un derecho solamente para una clase de personas, lo cual es un ataque a la libertad individual.
Ahora lo interesante de la libertad de expresión es eso, que todos podemos opinar aunque no sepamos del tema o estemos más que confundidos.

Anónimo dijo...

Con ese criterio quién no tenga casa, alimentos, mutualista, juego de dormitorio, lencería, no puede hacer el amor.
Hay vitaminas que aclaran las ideas.

Anónimo dijo...

Su propuesta me resulta decididamente antipática. Coincido con Claridades sobre la libertad de expresión. Debo reconocer de todos modos que si bien no se nada de marxismo, interpreto con idoneidad "silvestre" aquello de que "las religiones son el opio de los pueblos" para decir: El opio, y cualquier droga social, puede ser consumida sólo por quienes ya tengan resueltos los problemas básicos: alimentar a la familia.
Desde este punto de vista, la espiritualidad parece un lujo.
Saludos.

Anónimo dijo...

Cuando al principio ud dice "Desarrollar la espiritualidad cuesta dinero." quizá debería decir: "La espiritualidad puede entorpecer la aptitud para ganar dinero".

El resultado es el mismo pero así queda más claro. Si es que le entendí bien.

Besitos

Anónimo dijo...

¡Qué ironía no? Hay más pobres espirituales que ricos espirituales. No será que ud está un poco equivocado?

Anónimo dijo...

Anónimo, yo tampoco gusto de este artículo pero déjame comentarte que tu misma estas respondiéndote ya que hay muchísimos más pobres que ricos. Un 10% de pobre son millones y un 10% de ricos son 4 ó 5. Lo vés?

Anónimo dijo...

Cuando algo anda mal, casi seguro que empeore. Las creencias en seres imaginarios compensan la insoportable vulnerabilidad que padecemos, pero no nos fortalece para salir del problema. Es como tomar una aspirina para el dolor de cabeza en vez de eliminar la causa que lo provoca.

Anónimo dijo...

Ud no busca seducir a los lectores: EVIDENTEMENTE!!!

Espero que Dios lo ayude.

Anónimo dijo...

Si yo no creyera en los santos y otros seres imaginarios como ud le llama, estaría internada en un manicomio. Mi vida es un desastre y sólo la fe en Dios me permite levantarme todos los días y cumplir aunque más no sea mínimamente con lo que los demás necesitan de mi.

Anónimo dijo...

Tengo la fórmula mágica y secreta pero se las voy a decir porque uds me caen bien y soy la bruja más buena que podrían conocer:
Uds lo que tienen que hacer es trabajar, negociar, transar y conseguir mucha, mucha, mucha pasta, luego se van a la iglesia, a la sinagoga, al templo, a la ermita o a donde quieran y ahí sí, con el dinero en el bolsillo, sintiendo como aún está tibio y late, ahí le rezan a quien se les plazca para descansar durmiendo en el colchón de la fantasía.
Les gustó?
Tengo más. Otro día. Otro día. Por hoy ya basta.

Anónimo dijo...

Como dijo "Claridades", aquí se confunde como sinónimos la espiritualidad y la religión. Lo que ud plantea puede atribuirse hasta cierto punto a la religión pero no a la espiritualidad. Lo que llamamos espiritualidad forma parte (para decirlo de algún modo) del psiquismo. Vamos psicólogo!

Anónimo dijo...

Mire yo habría escrito el mismo artículo pero sustituyendo la palabra espiritualidad por intelectualidad.

Anónimo dijo...

Mi madre decía que papá era muy espiritual porque le gustaba la música.

Anónimo dijo...

Mire que depende de qué dioses estemos hablando. Debería ser más preciso.

Anónimo dijo...

Lo que sucede es que mientras uno trabaja y resuelve, tiene vida espiritual. Me parece que ud critica a las personas que se alejan demasiado de la realidad, buscando protección y/o justificación, en las creencias religiosas.

Anónimo dijo...

¡No puedo tener novia hasta que no alquile! Y yo que pensaba regalarle mi amorosa espiritualidad en el fitito:(

Anónimo dijo...

La espiritualidad no es un pasatiempo. Implica la conciencia de uno mismo. Esa conciencia se diluye en los pasatiempos y se fortalece en la espiritualidad.

Anónimo dijo...

La espiritualidad está antes que la religión, no se manifiesta necesariamente a través de creencias y dioses.

Anónimo dijo...

No puedo ignorar la realidad gratuitamente. Tengo que untar al
Superyó, aliarme al Inconciente y asegurarme de que termine pagando el Yo.

Anónimo dijo...

Mi abuela tiene la manía de asociar las cosas buenas a alguna cosa mala que pasó. Por ej: conocí a Laura mientras esperaba que me enyesaran la pierna, entonces la pata rota pasa a ser la causa de que yo conociera a Laura. Ese negocio no me sirve. Prefiero aceptar que tuve la puta mala suerte de romperme la pierna y la buenísima suerte de conocer a Laura. Pero no fue el dolor el emisario de mi alegría.

Anónimo dijo...

Desarrollar la espiritualidad no tiene costos, salvo quizás, el volverse más sensible al dolor. La enorme ganancia es en plenitud como ser humano.

Anónimo dijo...

me parece q el tema apunta a que hay personas q justifican la pobreza, nos han hecho creer q ser pobre de cosas materiales es bueno y en realidad todo es relativo segun el uso q le demos a las cosas. y me parece q tiene q quedar claro q las cosas materiales son muy necesarias, o a alguien le gusta morirse de frio en una casa sin calefaccion o pasar hambre?. para mi la espiritualidad es algo q forma parte de nosotros, de nuestro ser de nuestros pensamientos de nuestra conciencia y no depende de las religiones q solo manipulan y nos hacen creer q lo que ellos dicen es la verdad. Tambien entiendo q cada uno es libre de elegir y si a alguien la religion lo hace feliz bienvenido sea, pero no mezclemos las cosas no somos solo espiritu tamiben hay un cuerpo q satisfacer y una mente de complacer.
un abrazo

daniel

Anónimo dijo...

Es cierto. Ignorar la realidad a la larga sale caro. Vivir en un mundo de sueños no es vivir en este mundo. La espiritualidad se alimenta después de alimentar al estómago. Ignorar la realidad es defenderse en la guerra con un palillo.

Anónimo dijo...

Por favor no haga quedar tan mal a los psicólogos que después los que valen la pena, se quedan sin pacientes. El título de su blog es demasiado sugerente y uno espera encontrar allí algo diferente y no la banalidad de los que tienen el estómago lleno y nos vienen a decir lo que ellos mismos practican y no practican... "La espiritualidad es un pasatiempo que sólo tienen derecho a practicarlo quienes ya resolvieron las cuestiones materiales básicas (comida, vestimenta, salud, alojamiento)."

Anónimo dijo...

Mi querido amigo concuerdo con muchos de los comentarios anteriores respecto a la espiritualidad. Sin duda que te falta conocimiento al respecto. Y sindo un poco atrevida, te diría que muchoo. Si querés podés leer "El Secreto" de Rhonda Byrne, como un bocadito para ir entrando en tema. Justamente es todo lo contrario a lo planteado lo que a veces nos lleva a estar en una situación económica mejor. Pues cuando uno está bien consigo mismo lo logra. No por tener dinero y grandes satisfacciones económicas somos más felices o íntegros. Conozco muchas personas que realmente poseen dinero y da pena ver la pobreza que hay en sus vidas. Igual te quiero Fer. La brujita