Tener mucho dinero permite imaginar que se tienen
muchas necesidades, muchos deseos y, por lo tanto, mucha vida.
Lamentablemente este artículo
está destinado a no ser entendido o, en el peor de los casos, si fuera
entendido, deberá ser rápidamente descalificado o borrado de la memoria.
Algunos comentarios, y algunas
personas, están condenados al olvido.
El deseo y las necesidades son
las señales de existencia más confiables. Quien no desea ni necesita nada queda
expuesto a pensar que podría no estar vivo.
Primera conclusión abominable:
conservar deseos y necesidades es útil para tener conciencia de existir...¡nada
menos!
Dicho de otro modo: la
satisfacción plena de deseos y necesidades nos podría dar la sensación de que
no existimos. La saciedad provoca anestesia, insensibilidad, sensación
subjetiva de muerte.
El dinero es un bien, una
mercadería, un producto, cuya principal característica es la de ser permutable
por una cantidad elevadísima de bienes y servicios que podrían cancelar casi
todos nuestros deseos y necesidades.
Dicho de otro modo: esa
particularidad del dinero, (el ser tan eficamente permutable por una infinidad
de bienes y servicios), constituye una amenaza de (sensación subjetiva de)
muerte.
Estas condiciones pueden
llevarnos a la segunda conclusión abominable: tener dinero puede generar la
sensación de que, si quisiéramos, podríamos satisfacer cualquier necesidad o
deseo, pero como intuimos que si esto ocurriera nos quedaríamos sin la
sensibilidad propia de quienes están vivos, entonces la solución consiste en
tener mucho dinero pero no utilizarlo.
Esta situación está regida por
el sentimiento de avaricia, es decir, el placer de tener dinero por el dinero
mismo pero no para gastarlo.
Quien posee gran cantidad de
dinero siente una sensación subjetiva de vida, pues razona así: «Tengo la fortuna requerida para satisfacer la cantidad de deseos, de
necesidades y
de vida que imagino tener».
(Este es el Artículo Nº 1.811)
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8 comentarios:
Que alguien albergue en su inconsciente la creencia de que tiene mucha vida porque posee mucho dinero, es una creencia, simplemente. El problema está en que la persona se engaña a si misma. Eso puede traerle consecuencias que lo perjudiquen. O quizás permitirle ser más feliz. La verdad que no sé.
Los avaros provocan en las personas cercanas, las personas que los quieren, la sensación de ser despreciables e intrascendentes.
Mis necesidades y deseos más profundos no se satisfacen por medio del dinero.
Su hipótesis es valedera. Si usted estuviese en lo cierto, esto nos ayudaría a convivir con un avaro.
Dejar necesidades insatisfechas te hace pensar en el futuro; en el futuro en que las satisfacerás.
Quienes sufrieron mucho a causa de la pobreza, de la falta de dinero, se sentirán inclinados a pensar que el dinero satisfacerá todas sus necesidades y deseos. Pueden llegar a pensar que dinero equivale a vida.
Lo que dice Laura no sucede cuando la familia a la que pertenece el niño lo educa en otros valores.
Si un niño ve todo el tiempo que sus padres sufren a causa de la falta de dinero, dará a este un valor superlativo.
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