jueves, 15 de mayo de 2008

Planeta chico, infierno grande

Hay un concepto muy académico pero sencillo que se denomina «capacidad de carga». En poquísimas palabras significa algo así como «cuántos habitantes de las diferentes especies pueden convivir en un ecosistema sin que éste se resienta».

Thomas Robert Malthus fue un economista inglés que en 1798 publicó un libro titulado Ensayo sobre el principio de la población donde postulaba que la población mundial crece mucho más rápido que los recursos naturales necesarios para alimentarla.

Claro que semejante profecía fue radicalmente aplastada por quienes no podía soportar un pronóstico tan negativo. Es más, ser malthusiano equivale a ser una mala persona.

Pero lamentablemente hay indicios de que aquellas ideas horrorosas podrían ser ciertas si observamos cómo el petróleo se está agotando, los alimentos se encarecen, y otras señales que podrían inscribirse en aquella profecía.

Otras señales que para mí podrían inscribirse en aquella profecía son el aumento de los divorcios, la disminución de la tasa de natalidad y el aumento de la homosexualidad (en tanto es un tipo de convivencia no reproductiva). Ustedes podrán agregar que el temor al SIDA evita algunos coitos que podrían terminar en concepción, también hay interés en legalizar el aborto, y quizá existan otras señales que ahora no tengo presente.

Es probable que sin darnos cuenta estemos propiciando un enlentecimiento en la expansión demográfica porque nuestra intuición nos está indicando que el planeta tiene fatiga, parece escaso, se está quedando sin comida suficiente.

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13 comentarios:

Anónimo dijo...

"Lo esencial es invisible a los ojos" dice el cartelito medio borroso del dibujo del Principito. Me fascina todo eso.

Anónimo dijo...

Según la página http://www.census.gov/ipc/www/popclockworld.html ahora somos exactamente 6,668,022,223 personas.

¿Esto es mucho o es poco? NO SE.

Anónimo dijo...

Según http://es.wikipedia.org/wiki/Poblaci%C3%B3n_mundial#Poblaci.C3.B3n_a_trav.C3.A9s_de_la_historia hace 40 años éramos la mitad.

Me parece que vamos muy rápido porque forzosamente tiene que existir un techo. No puede ser que la cantidad de gente o de cualquier otra cosa pueda ser ilimitada porque el planeta parece grande pero razonablemente es una superficie que tiene una dimensión máxima.

Anónimo dijo...

MUY BUENA LA SUPOSICION ESTA DE PORQUÉ PASA LO DE LOS DIVORCIOS, LA HOMOSEXUALIDAD Y OTRAS COSAS. ¡MUY BUENA!

Anónimo dijo...

"...se está quedando sin comida suficiente". En Uruguay, cada vez que se aproxima un feriado, la mayoría hacemos compras de alimentos como para muchos días. La posible falta de comida me parece que da mucho miedo.

Anónimo dijo...

Con mi compañera (somos lesbianas) queremos adoptar uno o dos niños, así que la homosexualidad no significa necesariamente caída de la demografía.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con que la población tiene que tener un tope pero ¡atención! no nos olvidemos también de que los medios de comunicación son alarmistas por naturaleza. Ellos necesitan generar pánico para que todos quedemos pendientes de las noticias que ellos mismos después nos venden.

Anónimo dijo...

He leído mucho de historia y hasta hace por lo menos dos siglos para atrás, las poblaciones siempre estuvieron preocupadas por algo masivo, general. Tanto sean inundaciones, meteoritos, guerras, epidemias (ahora esto es menos probable pero hace poco anduvo el pánico con las gripe aviar, el dengue, la rabia).

Cada tanto aparece una moda tremendista y nunca falta algún decodificador místico que nos informa sobre un apocalipsis para dentro de poco.

Anónimo dijo...

No tiene mucho que ver pero llegó a mi país un familiar que es médico egresado de una universidad muy prestigiosa y me estuvo informando exactamente sobre el SIDA y resulta que si bien es peligroso, las posibilidades de contagio son mucho menores de las que a mi me habían informado a través de la radio y de los folletos.

Anónimo dijo...

Así que al efecto invernadero, al recalentamiento global, al agujero de la capa de ozono y el peligro de la radiación ultravioleta y de algún meteoríto que se salga de la carretera y nos parta en dos, tendríamos que estar pensando que necesitamos algún genocidio medio grande como para equilibrar la relación terreno-habitantes?

Anónimo dijo...

Algo en broma, algo en serio, acusé a un médico amigo de estar causando un cataclismo ecológico con la prolongación de la edad promedio de nuestra especie. Él lo tomo como si yo le hablara en serio y me contestó: "Es responsabilidad de los dentistas porque los seres humanos siempre se han muerto al poco tiempo de quedarse sin poder masticar por falta de dentadura".

Anónimo dijo...

Más precisamente lo que dijo Malthus fue que la población mundial crece en progresión geométrica (1-2-4-8-16-32...) mientras que los recursos naturales sólo crecen en progresión aritmética (1-3-5-7-9-11...), o sea que en la geométrica multipliqué por 2 y en la segunda sumé 2.

Anónimo dijo...

Para mí, una buena edad para morirse es a los 50 años. Ya ayudaron todo lo que tenían que ayudar a los hijos y después, basta, se terminó.

A mi me faltan 24. Es mucho todavía.