domingo, 31 de agosto de 2008

El Señor sólo está en el Cielo

¿Alguna vez escuchó que alguien diga «Acá todos somos jefes» ó «Habemos más caciques que indios»?

Está en nuestra lógica pensar que los que mandan no trabajan y que el trabajo lo hacen solamente los que no dan órdenes.

La palabra «señor» corresponde a un título de nobleza y hasta hace unos pocos siglos era utilizada exclusivamente para designar a los propietarios de tierras y administradores del trabajo de siervos, vasallos o esclavos.

El título les llegaba en forma hereditaria así que sólo tenían que tener la suerte de ser hijos de otro señor. Si eran hijos de siervos, vasallos o esclavos, nunca podrían convertirse en «señor».

Si será importante este título que también se usa (aunque con mayúscula) para designar —en la cultura judeocristiana— a Dios (y más recientemente también a Jesús).

Como nuestra cultura democratizó el uso de este titulo nobiliario y hoy todos somos «señor» o «señora», es probable que también podamos tener la creencia íntimamente arraigada de que no nos corresponde trabajar y que también por eso tengamos veleidades de jefe aún cuando no sea ese nuestro rol actual.

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18 comentarios:

Anónimo dijo...

Ojo que soy el Sr. Rogelio Roldán. Respeten che!! jaja

Anónimo dijo...

O sea que ud dice que nos estamos durmiendo en los laureles sin merecerlo?

Anónimo dijo...

Me cueta entender su lógica, pero algo me dice que tiene un poquito de razón. Sólo un poquito.

Anónimo dijo...

Me siento un poco Diosa porque me marido me lo dice. Coincide con buen sexo o buena comida, pero no hago hincapié.

Anónimo dijo...

No sé mandar y mucho menos sé trabajar. Me parece que me pagan porque doy lástima. Pero me pagan.

Anónimo dijo...

Mi padre tiene muchos terrenos, apartamentos y casas. Somos dos hermanos y el día que él muera, me quedaré con una pequeña fortuna.

Anónimo dijo...

Muchas veces no nos remangamos para laburar porque no nos gusta perder la imágen de señor, aunque seamos unos chantas.

Anónimo dijo...

A veces en la oficina pasan cosas increíbles: una funcionaria que ascendió del sector limpieza al sector administrativo, generó rechazo al incorporarse a su nuevo sector. Parece que para mantener claras las jerarquías cada sector tenía que ser como una casta, porque si se podía ascender también se podría descender.

Anónimo dijo...

Formo parte de un equipo técnico que trabaja con enfermos psiquiátricos y día a día observo los esfuerzos denodados que se hacen para remarcar las diferencias entre los supuestamente sanos y los enfermos.

Anónimo dijo...

Dar órdenes es un trabajo que exige mucha responsabilidad y trabajo intelectual. Es mayor el stress que sufrimos los supervisores que los empleados.

Anónimo dijo...

La primera vez que te dicen señor, te sentís viejo. Como los viejos no trabajan, me parece coherente lo que ud. dice.

Anónimo dijo...

Nunca permito que me llamen señora, siempre pido que me llamen por mi nombre. Con lo que ud. dice, voy a reconsiderarlo.

Anónimo dijo...

Ahora me doy cuenta porqué me gusta tanto que mi esposo me llame reina.

Anónimo dijo...

Cuando una persona de origen humilde asciende socialmente, los grupos privilegiados pueden llegar a sentir la amenaza de desaparecer.

Anónimo dijo...

Otra frase muy común es "quiero hablar con el dueño del circo y no con los monos". Cuando los monos son los que más trabajan y el dueño del circo se hace el otario, eso da mucha bronca. De todos modos reconozco que por solicitudes o quejas, lo correcto es dirigirse al dueño.

Anónimo dijo...

Nos cuesta aceptar la autoridad del jefe porque carecemos de sentido práctico.

Anónimo dijo...

Todavía la posición social se sigue determinando en gran medida por la familia de la que se proviene.

Anónimo dijo...

El título de "señor" no se tendría que haber democratizado, directamente se tendría que haber eliminado y así no quedarían resabios.