Cuando una mujer logra abandonar su rol de «hija», puede enamorarse de un varón y así contribuir al
bienestar social.
Cada tanto tiempo, generalmente 4 ó 5 años,
los países eligen a un grupo de personas para que se encargue de gobernar.
Su tarea consistirá en administrar los
recursos de tal forma que una mayoría esté conforme, satisfecha, tranquila.
Al final del período el grupo de gobernantes
deberá abandonar la tarea entregando a los sucesores un país igual o mejor de
como lo encontró.
La gestión de gobierno depende en gran medida
de cómo funcione la sociedad. Existen colectivos pacíficos, trabajadores,
colaboradores y también existen colectivos belicosos, vagos y perturbadores.
Los varones y las mujeres somos muy distintos
(1) y gobernarnos como
si fuéramos iguales no conduce a un buen fin.
Las mujeres
tienden al sedentarismo por que la función reproductiva lo requiere; los
varones somos nómades, desocupados la mayor parte del tiempo y bastante
inescrupulosos.
Si
pudiéramos reducir la población a un número mínimo de dos personas, la
situación ideal sería la de una mujer enamorada de un varón, a quien trate con
ternura maternal, logrando de él una conducta opuesta a la mencionada.
En otras
palabras, cuando una mujer, obligada al sedentarismo porque atender a sus hijos
se lo impone, está enamorada de un varón, logrará de él que también se vuelva
sedentario, trabajador, juicioso, escrupuloso, responsable, protector. En suma:
logrará de él «un buen padre de familia».
No estoy
considerando si el varón está o no enamorado de esa mujer porque lo
sobreentiendo: si una mujer se enamora de un hombre, es casi imposible que este
no renuncie a todos sus intereses personales para acompañarla, protejerla,
proveerla.
Si una
mujer no pueden enamorarse de ningún hombre porque no abandona su rol de
«hija», la sociedad se perjudica.
(Este es el
Artículo Nº 1.582)
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11 comentarios:
No sé bien que entiende usted por enamorarse. Lo que yo entiendo por enamorarse es un estado de deslumbramiento e idealización del hombre o la mujer a la que van dirigidos los sentimientos. Por lo tanto se trata de un autoengaño. Depositamos en esa persona lo que nosotros queremos que sea y que nos de. No lo vemos tal cual es y si no nos da lo que esperábamos, nos desilusionamos y se termina el enamoramiento. Por eso creo que el enamoramiento es muy frágil. Sobre él no se puede construir nada sólido. En esa persona vemos a nuestra madre y/o a nuestro padre. Esa sería una postura infantil.
Yo no entiendo por enamorarse lo mismo que Gloria. Para mí enamorarse es amar a alguien tal cual lo vemos, con lo que nos gusta y con lo que nos complica de esa persona.
¿Puede uno enamorarse o amar a más de una persona al mismo tiempo?
Depende de que tipo de amor estemos hablando, Eugenia. Si es amor filial supongo que sí.
Creo que en el amor que incluye el sexo se puede amar a una persona y querer a muchas.
¿Y amar a varios amigos?
Bueno, amar a varios amigos... ¿Amigos con los que se tiene sexo? Si es esa tu pregunta, lo que yo pienso es que se puede querer a muchos amigos y tener sexo con ellos, pero amar... creo que a uno solo. De todos modos no estoy seguro. No he vivido la experiencia.
Perdoná, me doy cuenta que respondo tu pregunta volviendo a repetir lo que dije antes. No tengo más para aportar.
No entiendo por qué todos hablan de la fidelidad, si en el artículo ese tema no se plantea.
¿Cómo que el hombre renuncia a todos sus intereses personales para acompañarla, protegerla, proveerla? ¿No es eso tratarla como a una niña? ¿No es eso abandonar el sano y responsable egoísmo personal?
Que la sociedad se perjudica si el hombre no acompaña a la mujer mientras cría a sus hijos, me parece que es cierto.
La mujer puede apoyarse en muchas personas para criar a sus hijos y eso no es conservar el rol de hija.
Lamentablemente no existe el semen ni la sangre sintética. Por eso hay tanto problema para conseguir un hombre que no moleste y donantes que vayan en ayuno a que los pinchen.
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