lunes, 4 de mayo de 2009

La pobreza estratégica

Cuando un ciudadano transgrede una norma se dice que está en deuda con la sociedad. Ésta se la cobra privándolo de libertad, imponiéndole trabajos comunitarios o cobrándole una multa.

La pregunta que me hago es: si pagar una multa es una sanción, ¿por qué algunas personas no parecen interesadas en tener dinero? ¿Se auto-castigan acaso?

Es bien conocido el caso de quienes ponen todos sus bienes a nombre de terceras personas para que ante el Estado figuren como si fueran pobres, insolventes, incapaces de pagar una multa.

Observando la conducta de quienes prefieren no tener dinero y los que ponen sus bienes a nombre de terceros para mostrarse como si no tuvieran dinero, podríamos pensar que, tratándose en ambos casos de personas de inteligencia normal, ambos están haciendo lo mismo: Quitándole a la sociedad la posibilidad de cobrarse las deudas que sus transgresiones pudieran generar.

La pobreza puede ser una estrategia para evitar ser castigados en caso de cometer una falta. De alguna forma los pobres e insolventes son inimputables, no pueden ser castigados, como si fueran menores de edad o mentalmente incapaces.

En este caso, no deberíamos hablar de pobreza patológica sino de pobreza estratégica.

●●●

21 comentarios:

Carmelo Selleras dijo...

Si un modesto carricoche tirado por un caballo te estropea la pintura de tu carro, olvídalo! Paga y a otra cosa.

Rafael Cortondo dijo...

A veces lo que duele de cualquier sanción (una multa, un rezongo, un silencio) es la actitud punitiva del que la realiza. El hecho en sí puede ser insignificante.

Carlos Rosas dijo...

La justicia de los hombres es tan imperfecta como los mismos hombres. A veces no hay más remedio que eludir la justicia por sus injusticias.

Serafina dijo...

A usted le parece que los pobres son evasores. Es una posibilidad. Puede ser que algunos pobres hagan eso, pero la mayoría tienen dos problemas separados o que se agravan mutuamente: Padecen la escasez de su condición económica y además comenten faltas como puede cometer cualquiera y tienen que pagar con cárcel lo que podría haberse arreglado con una multa.

Enrique Pérez dijo...

Yo tengo una enfermedad que me hace gastar mucho dinero y por eso creo que es una multa que me cobra la vida por alguna falta que no recuerdo.

Nidia Serrano dijo...

A ver si puedo pensar como usted: Si el dinero cancela una culpa, entonces el dinero es (también) una culpa.

Cayetano Delía dijo...

Desde otro punto de vista se puede decir que la riqueza es una estrategia para vivir mejor. Si además pueden pagar una multa, pues bueno señores, esa es una consecuencia desagradable de tener dinero, así como no tenerlo, sirve para no pagar multas pero hay que tolerar las estrecheces económicas.

Resultado: empate técnico.

Carolina dijo...

La dueña de un prostíbulo muy famoso decía que muchas mujeres disfrutan de su trabajo y que si no les gustara (aunque sea algo), no lo podría ejercer tan bien como lo hacen.

Si esto fuera cierto y con su propuesta pienso que si esas vocacionales necesitan además una razón objetiva para ejercer una profesión tan repudiada.

La necesidad de dinero puede ser una razón 'aceptable'.

Rihana dijo...

Parece mentira pero hay políticos que apoyan que haya desocupación de mano de obra para que los salarios no sean un factor inflacionario. Si hay muchos desocupados, el salario baja y las cosas cuestan menos. ¡Cuánta perversidad caballero!

Jorge Medero dijo...

Llegué a su blog buscando ampliar la información que ya conozco y me sorprende qué diferente piensa usted sin dejar de ser razonable.

Ulises Acosta dijo...

Una estrategia bélica básica consiste en cortarle los suministros de alimentos, abrigo, medicina y municiones al enemigo. En la compentencia comercial que tienen los países, ya no se cruzan tiros, pero quizá busquen la forma de que los competidores se debiliten por el desabastecimiento.

La pobreza de una nación es una aliada de los competidores. Favorecerla es un acto cuasi bélico, que si fuera desde adentro mismo, constituiría una forma de traición.

Valeria Yañez dijo...

La recomendación de Jesus de poner la otra mejilla está desactualizada.

Hoy es preciso evitar ser sancionado. Quienes son víctimas de la culpa, probablemente les vaya mal tb en otros órdenes de su vida.

el príncipe dijo...

Quienes hacen el voto de pobreza, viven una pobreza estratégica porque la han elegido conscientemente. Si la elección a favor de la pobreza se ha tomado "a pesar de uno", no podemos hablar de estrategia.

Yolanda Casas dijo...

La pobreza estratégica es la de quienes ponen sus bienes a nombre de terceros. La otra pobreza es tragedia.

Testimonial dijo...

Actualmente en mi país un desaparecido se cobra 40.000 dólares.

Leonardo dijo...

Con Norma quedé en deuda porque transgredí su recato.

Robin dijo...

Propone que los pobres nos sintamos culpables por no pagar la culpa con multa ¡malta, pulpa, cáspitas!

Diógenes dijo...

Estoy en deuda con la sociedad capitalista porque no genero capital. Al fin una deuda que vale la pena!

Anónimo dijo...

En mi dialecto, cuando un ciudadano transgrede una norma se dice que está zarpado.

el Superyó dijo...

No tiene sentido ser pobre para evitar ser castigado por las multas, si el Inconsciente piensa así es un estúpido.

Enrique III dijo...

Pongo mis bienes a nombre de terceros porque es lo que corresponde.